Las colas se comenzaron a registrar desde la noche del domingo, a pesar de las advertencias del gabinete de combustible de que bloquearán los TAG de quienes pernoctan a las afueras de las estaciones de servicio
Después de una semana paralizada, la venta de gasolina en el Táchira reinició este lunes 29 de junio con largas colas y un despacho lento en San Cristóbal, según denunciaron usuarios en espera para abastecer.
Desde la noche del domingo se comenzaron a registrar colas a las afueras de las estaciones de servicio en donde se conocía había llegado gandola con gasolina, y a pesar de que la coordinadora del gabinete de combustible y diputada del Consejo Legislativo Estadal (CLE), Nellyver Lugo, informó a través de sus redes sociales que serían suspendidos los TAG de quienes estuvieran pernoctando a las afueras de las estaciones de servicio, hubo quienes no se fueron.
Selenia Gómez, habitante de San Cristóbal, llegó a las 4:30 de la mañana a hacer cola en la estación de servicio ubicada en la avenida Antonio José de Sucre. Tenía unos 40 vehículos por delante, pero la gandola llegó a las 10 de la mañana, por lo que a las 11 aún no habían comenzado a surtir.
“Me parece una falta de planificación en el caso de lo que sucede donde estoy. Tuvieron 10 días para acondicionar las estaciones de servicio que echarían, y aun así sucede esto, que es un irrespeto y una falta de consideración, mínimo aquí hay 400 personas en este padecimiento. Aumentaron el precio del combustible y les sigue dando igual que la gente pierda su día, su madrugada, puro discurso pero no hay respeto. En el centro del país no es así, condenan al Táchira”, expresó.
María Pérez estaba desde las 5:45 de la mañana en la cola de la estación de servicio de la Unidad Vecinal. A las 2 de la tarde aún no había logrado abastecer, denunció que hubo coleados. “No hay derecho de perder un día de trabajo por un tanque de gasolina. Uno se mete aquí y no hay certeza de llenar el tanque, y si tienes la certeza igual no sabes a qué hora vas a salir, por la cantidad de coleados que pasan. Es un desorden y la realidad es que ni con aumento se consigue aliviar esta pesadilla que llevamos años padeciendo los tachirenses”, agregó.
Armando Méndez tiene 67 años de edad. Salió de su casa a las 5 de la mañana y se incorporó a una cola cercana, a las 5:30 se enteró que donde estaba no correspondía con el terminal de su número de TAG y tuvo que mudarse a otra, encontrándose una cola el doble de larga.
“Esta cola ni se entiende. Hoy madrugué esperando salir temprano y a las 3 de la tarde sigo en una cola que no se ni por donde pasa, parece una culebra de las vueltas que da”, manifestó.
Martín Zambrano estaba en cola en la estación de servicio La Famosa. Llegó a las 5 de la mañana y eran las 11 de la mañana y no había pasado ni la primera persona. “No pude trabajar hoy porque la gandola llegó a las 10 de la mañana, estoy a unos 100 carros de cargar gasolina y con el riesgo de que si no tengo el carnet de la patria puede que no me echen”, agregó.