(Especial/ Italia) Una historia que significa mucho para 23 hombres y mujeres que entregaron décadas de su vida a formarse en una de las profesiones más útiles a la humanidad, la de medicina. Tras su migración forzosa desde Venezuela, debieron paralizar su labor médica y dedicarse a otro oficio, a pesar de su elevada formación.
Dejaron atrás su sueño profesional, se fueron de Venezuela como lo han hecho unos 5 millones de sus coterráneos. Ya en el viejo continente ejercer la medicina resultó casi imposible, porque lograr reconocer sus títulos es en extremo complicado y costoso, lo que les obligó a trabajar en cualquier otro trabajo.
Pero desde hace tres semanas ejercen en tres importantes hospitales. Ellos migraban, mientras otro grupo de sus paisanos se organizaron en la Asociación Pequeña Venecia, que reúne a venezolanos en Italia y que preside la periodista venezolana, Mayirelis Tremamunno, quien junto a un equipo trabajaron arduamente para lograr, que a propósito de la crisis de sanitaria ocasionada por la pandemia en el país europeo, los venezolanos volvieran a desempolvar sus batas blancas y activarán sus conocimientos sirviendo a pacientes en tres hospitales italianos de la región de Molise.
“Si regreso ponerlo en práctica en mi país”
Yosela Odorisio, es anestesióloga, trabajaba en Hospital Dr. Manuel. Noriega Trigo de Maracaibo. Emigró hace dos años a España, porque allá están sus hijos, pero no había ejercido su profesión desde que llegó a Europa, ahora tiene la oportunidad.
“Es una oportunidad única estar trabajando aquí en Italia, no difiere mucho de lo que hacía en Maracaibo cuando teníamos todos los recursos. Al principio me asusté, pero he podido hacerlo y me han tratado muy bien los colegas y el personal”.
Asegura la médica venezolana que está muy entusiasta por volver a ejercer tras dos años, “tratando de hacerlo lo mejor posible, para demostrar cómo estamos preparados los médicos venezolanos y también dispuesta a aprender todo lo que pueda, por si regreso ponerlo en práctica en mi país”.
La Pequeña Venecia hizo el trabajo
Marinellys Tremamunno, es la presidente de la ONG que hizo posible el trabajo de los médicos venezolanos en Italia, señaló que fue una ardua labor pero que lograron integrar a la acción laboral a eminentes médicos venezolanos, entre ellos 2 internistas, 2 cirujanos y 10 médicos generales. Cabe señalar que 9 ya vivían en Italia, 4 en España y 5 en Portugal.
Los profesionales de la salud fueron reclutados a través de un llamado emitido con el apoyo de la Asociación de Médicos Venezolanos en España, representada por el Dr. Giovanni Provenza. No habían podido ejercer la profesión por problemas burocráticos que ha impedido el reconocimiento de sus títulos de estudio, relató Tremamunno.
El visto bueno para la acción de los médicos venezolanos en Molise fue formalizado a través de un decreto suscrito el pasado 24 de febrero, emitido por el Comisario Angelo Giustini, de acuerdo a los establecido en el artículo 13 del decreto “Cura Italia” (Gaceta Oficial del 17 de marzo de 2020), que hoy permite el ejercicio temporal de los profesionales de la salud que posean títulos universitarios obtenidos en el extranjero, mientras dure el estado de emergencia, informó la presidenta de la Pequeña Venecia.
Hicieron gestiones con Molise, Italia, a través de la ONG Pequeña Venecia. Presentaron una propuesta como asociación hace más de un año cuando comenzaba la pandemia, lo que dio paso a la derogación temporal de la obligación del reconocimiento de médicos y enfermeros extranjeros para ejercer en Italia, mientras exista el estado de emergencia ocasionado por el Covid19.
Tras la acción de la Pequeña Venecia se decidió seleccionar médicos venezolanos, cuenta con agrado Marinellys Tremamunno, quien sumó gestiones a todos los niveles políticos y sociales a fin de permitir la presencia médicos venezolanos en Italia.
Más de 150 médicos en Europa
En la base de datos de la Asociación suman unos 150 profesionales de la medicina egresados de universidades venezolanas, que viven en Europa y no podía ejercer porque no tienen reconocido su título de estudio: “Hay médicos que tienen años viviendo en Italia y no han podido ejercer profesionalmente por este obstáculo, lo que se mostró, considerando la emergencia sanitaria de Italia”.
Italia también se dio la oportunidad de contar con el personal capacitado que ya vivía en Europa, pero no fueron traídos médicos desde Venezuela, porque ya estaban en Europa.
“No hemos traído médicos de Venezuela y tampoco es posible traerlos, ya estaban regularizados nivel de su residencia, esto no hubiese sido posible sin tener sus papeles en regla, incluso algunos ya tenían ciudadanía europea”.
Tremamunno dice, que es una oportunidad que logran para esa diáspora que se encuentra en Italia, lo que da un beneficio que va más allá del laboral, “les permite tener una experiencia en Italia, y si un día regresan a Venezuela puede aplicar su experiencia, incluso es una oportunidad para que se reconecten con lo que son realmente, su profesión. Tomando en cuenta que en los procesos migratorios se vive un proceso de afectación de la autoestima y esta oportunidad les permitirá también auto-reconocerse como profesionales y por qué no, en mediano plazo poder regularizar su situación y ejercer en Europa”.
Sostiene la presidenta de la Pequeña Venecia, que también este un beneficio que permite a Italia entender y conocer la calidad de los profesionales que se encuentran en el país sin poder reconocer sus profesiones, por los complicados procesos burocráticos para homologar títulos.
En tres hospitales
El grupo de médicos venezolanos que fue aprobado y está trabajando son 23, trabajan en los tres hospitales principales de la región de Molise, en el Cardareli de la capital del estado, Campo Vasso, y los otros dos hospitales están Isernia y Térmolí, “son tres hospitales referencia a nivel regional”.
Los médicos venezolanos contratados por Italia se encontraban en España, Portugal e Italia, “hacían trabajos que nada tienen que ver con sus profesiones, trabajos dignos, pero no acordes con sus niveles de estudio y preparación. Esperamos que esto sirva para que el gobierno de Italia, de alguna manera ponga sus ojos en la diáspora venezolana y se pueda generar algún canal de flexibilización para estos procesos tan complicados”.