Cada 1 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Ecología, como una forma de crear conciencia en la población sobre la preservación del medio ambiente, en pro de establecer una relación armónica con todo aquello que nos rodea.
La importancia del cuidado del medio ambiente radica en buscar métodos para impedir que haya especies en extinción, fenómeno que altera las relaciones con otros seres vivos, al igual que la desaparición de bosques y la contaminación de determinados ecosistemas.
En este sentido, la ecología como ciencia no sólo se limita a la preservación de las áreas verdes, sino también busca que las actividades a favor del medio ambiente formen parte con el propósito de mejor la calidad de vida de los seres humanos.
Los mayores retos que afronta la ecología son: la desertización, el aumento de la temperatura, la erosión de los terrenos, la destrucción de la biodiversidad, la crisis mundial de los recursos hídricos y la contaminación del aire, del suelo y del agua.