I
La mayoría de los trujillanos coincidimos en que la realidad que cotidianamente vivimos no se corresponde con el potencial de desarrollo que tiene Trujillo. Dicho de otra manera: Trujillo tiene los recursos para ser una realidad muchísimo mejor de la que es.
Contamos con buen capital humano, recursos naturales abundantes y un capital relacional que debemos evaluar para mejorarlo, porque está muy influido y afectado por la grieta producida por absurdos fanatismos, complejos emocionales y resentimientos, cuando en el fondo de nuestras almas todos queremos lo mejor para Trujillo.
¿POR QUÉ DARLE MÁS IMPORTANCIA A LO QUE NOS SEPARA QUÉ A LO QUE NOS ACERCA?
Es necesario que nos reencontremos y nos reconozcamos para dar el gran salto y cambiarle el rumbo y el ritmo a Trujillo. Antes, unidos y diversos, debemos acordar hacia dónde, definir con claridad la dirección de nuestras acciones transformadoras, por aquello que dijo Séneca: «no hay viento favorable para el que no sabe a dónde va.»
Todas las dimensiones del capital social que requiere Trujillo: humano, relacional, ambiental y direccional, están en estrecha relación con la energía que esparce la palabra, con las conversaciones de los trujillanos.
La unidad social de Trujillo, la familia, es un sistema de conversaciones. Trujillo es un complejo sistema de conversaciones. Trujillo es, en definitiva, sus conversaciones.
Preguntémonos:
¿será acaso que Trujillo está como está por la calidad de sus conversaciones? ¿será que entre los trujillanos prevalecen las conversaciones tóxicas que esterilizan la energía necesaria para nuestra transformación y desarrollo? ¿será que no conversamos de lo se necesita conversar para desencadenar el Trujillo Posible?.
II
Para lograr el despliegue de una visión es necesario definir procesos y coordinar acciones.
La definición de procesos y la coordinación de acciones los seres humanos la hacemos CONVERSANDO, es por ello que debemos revisar cuan diestros somos los trujillanos cuando de CONVERSAR se trata. Conversar es más que hablar, y tengamos muy presente que una destreza conversacional fundamental es el ESCUCHAR, que implica estar dispuesto a cambiar de opinión.
Necesitamos conversaciones que abran mundos, que desencadenen lo posible, especialmente hoy, cuando aumentan las oportunidades para hacer realidad lo posible.
Me tome la libertad de adaptar unas notas del Doctor Carlos Vignolo al «CASO TRUJILLO» para orientar un proceso de transformación de la realidad trujillana:
- Generar un nuevo proyecto estratégico para Trujillo, una nueva visión y nuevos valores, centrado en los elementos esenciales del capital social, el fundamental rol de las relaciones, las emociones y los contextos facilitadores.
- Diseñar y poner en marcha un proceso de mutación cultural -narrativas y prácticas- en coherencia con el nuevo proyecto estratégico.
- Diseñar y poner en acción un profundo proceso de reconversión paradigmática de los trujillanos, especialmente de los directivos públicos y privados, en coherencia con el paradigma del capital social y con el nuevo proyecto estratégico. Ello a través de programas de generación de «sentido de urgencia», expansión de conciencia, desarrollo de habilidades y cambio actitudinal.
- Asumir como rol fundamental la generación de dinámicas de transformación del sistema de educación y capacitación para adaptarlo velozmente a las nuevas realidades, fácticas y paradigmáticas.
- Asumir ese mismo rol en relación al sistema científico tecnológico.
- Asumir la función de cautelar el bien público, la paz social y la convivencia armónica por medio de la generación de contextos en que los valores centrales del nuevo paradigma sean rigurosamente asegurados: el respeto, la aceptación, valoración, promoción de la diversidad y las diferencias, la igualdad de oportunidades, la confianza, la colaboración, la solidaridad, el compromiso de todos con el bienestar de todos.
- Una forma muy poderosa de entender las RELACIONES ENTRE PERSONAS es conceptualizándolas fenomenológicamente, como PROCESOS CONVERSACIONALES en los cuales lo que las personas hacen es CONSTRUIR LA REALIDAD en que viven.
- La CALIDAD de las RELACIONES entre los trujillanos viene dada por la CALIDAD de sus CONVERSACIONES, tanto de las conversaciones que se producen, como de las conversaciones que deberían darse pero no se dan y son necesarias para la transformación y el desarrollo posible.
Relaciones, conversaciones, lenguaje y destrezas conversacionales son VARIABLES DE DESARROLLO que no hemos valorado suficientemente, por nuestra costumbre de colocar el énfasis en los RECURSOS MATERIALES, ignorando lo que la vida utiliza para hacer realidad lo posible: LAS RELACIONES Y LOS PROCESOS CONVERSACIONALES QUE LAS CONSTITUYEN.
Concluyo esta nota citando una frase del Apóstol Mateo: «DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZÓN HABLA LA BOCA».
Relaciono la frase de San Mateo con lo expresado por Bill O’Brien, Presidente de Hanover Insurance Company: «EL ÉXITO DE UNA INTERVENCIÓN EN CUALQUIER ÁMBITO DEPENDE DE LA CONDICIÓN INTERIOR DEL INTERVENTOR».
La condición interior del interventor es el estado de su corazón.
Nuestras conversaciones revelan el estado de nuestros corazones.
Formar trujillanos de corazón abundante es tarea necesaria.
Los Trujillanos tenemos ENCADENADO al Trujillo Posible, para DESENCADENARLO necesitamos NUEVAS NARRATIVAS y mucha ABUNDANCIA DE CORAZÓN.
Buenos temas para pensar, conversar y actuar, a propósito del NUEVE DE OCTUBRE. Debemos recuperar el VALOR de Niquitao y el AMOR de Santa Ana. La sociedad civil trujillana tiene la oportunidad de transformar a Trujillo. Es la hora del Trujillo Posible.
«¿Por qué no tomar una lámpara y salir a la aventura? Si quieres ser alegre, date prisa, no esperes otra ocasión.» (Mao Tse Tung)
«Una jornada de mil millas comienza con un primer paso.» (Lao Tse)
EMU
OCTUBRE 9, 2022
Valera, Ciudad Bicentenaria.
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